Definitivamente el formato acústico-raro-improvisado ha llegado para quedarse como una opción más en el Gastrotour 2008. Ayer la tendinitis y la fiebre de Txema y las costillas magulladas de Ricardo Motel (ambos lesionados tras comerse un escalón) no impidieron que diéramos un concierto como la copa de un pino en Los Caños (Colmenarejo), un sitio en el que el público, selecto no por escaso sino por pertenecer a un grupo de auténticos elegidos, es tan importante como la banda que toca. Ayer, ampliando la plantilla de 57 grados estuvieron, como viene siendo habitual, Ricardo y sus armónicas y el gran Robert Plant de Quintana.
Y aunque esté mal que lo digamos nosotros, qué elegancia de concierto, oiga. Fuimos poseídos por el espíritu de Robert Johnson y nos tiramos en plancha a por el blues más algodonero, el country más rural y en general a por todo lo que se nos puso por delante. Ahora los modernos lo llaman 'americana'. Manda huevos.
Momentos estelares del chou, según nosotros mismos:
- Los caretos de los seguidores/as más veteranos/as cada vez que destripábamos un clásico de la banda.
- Versión country de 'Lo que vendrá después'
- Versión jazzera e intimista de 'Anarchy in the UK'
- Versión drum&bass funky de '57 grados'
- Colaboraciones, que ya forman parte de la banda, de auténtico lujazo
- 'Molly', siempre 'Molly'
Esto se repetirá, no lo dudéis.
Y ahora, como cada vez es más habitual, las frases más repetidas de la noche:
- "Esa guitarrita española" (Caco)
- "Tócame una canción guay para las chicas" (Caco)
- "Yo es que soy donativo...de órganos" (El narber guar)
- "Yo ya no muevo más el brazo" (Txema)
- "¿Y yo cuándo descanso?" (Míchel)
- "Quédate en mi casa que yo guardo los perros" (Pablo)
En breve pondremos por aquí material gráfico del evento, porque tiene que haber por ahí varias memorias de móvil llenas de fotos.
El concierto acabó con el público asaltando la barra mientras la banda y todo lo que le rodea (Javi Motel, Dj Flow) se marcaba una minifiesta gitana rockanrolera cantando clásicos del rock y montañesas (Ricardo, ahí eres muy grande) con "esa guitarrita española". Y venga, a casa a sudar la fiebre.
ÚLTIMA HORA: Para acabar la noche, Pablo decidió unirse al grupo de Step Eaters dándose un ostión en las escaleras de su casa. Afortunadamente no le pasó nada y pudo seguir durmiendo sobre los escalones tranquilamente.
3 comentarios:
¡Salud! Tengo al Robert Plant de Quintana feliz como un niño después de esa peasso de friqui-velada y su versión (impagable, dice) del "Rock and Roll All Nite".
¡Viva el blues, los cubatas de Ron Barceló Reserva (¡a 4'50!) y esos Kiss a los que sin duda veremos en Bilbo!
¡CARROMATO FOR PRESIDENT! ¡Y CACO.COM de Ministro de Cultura!
Tengo las ribs que no me dan pa más, sobre todo después de soplar la armónica un buen rato, cantar el "rock and roll" de Led Zeppelin como un capao y las dos montañesas. Eso si, como buen Step Eater...por que se repita muchas-muchas veces (lo del hostión no,por favor). El Robert Plant de Quintana...espectacular en los kiss y versiones del rock and roll post concierto!!!!!!!!.Salud y Rock.
Esta semana ya sabéis, bolsas de hielo, antiinflamatorios, calmantes y a superar las lesiones, que parecemos un equipo de fútbol con el virus FIFA.
Publicar un comentario